En todas nuestras actividades formativas incluimos prácticas de entrenamiento integradas mente-cuerpo sobre la base de la metodología Mental Toughness, lo que ayudará a nuestros alumnos a potenciar la autoconfianza en sí mismos, su motivación, actitud ganadora resiliencia y antifragilidad para prosperar en estos tiempos turbulentos de crisis y de tecnologías emergentes disruptivas, superando cualesquiera miedos, obstáculos, amenazas y el estrés perjudicial que podría derivarse de no saber afrontarlos.
La metodología Mental Toughness está siendo usada, entre otros, por la NASA en el entrenamiento de los astronautas; los Comités Olímpicos de los países más destacados en actividades deportivas; los cuerpos de élite de los ejércitos más poderosos y las más relevantes compañías de la lista “Fortune 500”.
Metodología
La metodología Mental Toughness consta de 4 etapas:
- Mejorar el foco, la atención y concentración en lo que se quiere hacer y se está haciendo.
- Visualizar, imaginado creativamente, lo que se quiere hacer y cómo hacerlo. A destacar que los centros cerebrales de la visualización están estrechamente conectados con los de la acción eficaz.
- Potenciar los diálogos internos positivos, aunque de forma realista, considerando reflexivamente lo que puede salir mal. Lo que, a la hora de tomar riesgos, significa lograr un idóneo equilibrio entre los extremos del optimismo exagerado e impulsivo y la apatía paralizante.
- Regular la actividad, el “arousal”, el estado de excitación y alerta exagerados, para mantener la calma, la tranquilidad y serenidad que son necesarias para poder pensar bien.
El sabio Confucio pensaba y recomendaba:
“Primero debes estar tranquilo, y luego tu mente podrá estar serena. Una vez que tu mente esté serena, estarás en paz. Solo cuando estés en paz, serás capaz de pensar, y finalmente, progresar”.
Para regular el estado de alerta desmedido, entre otras técnicas mente-cuerpo, se utilizan las de respiración yoga, relajación progresiva de Jacobson, entrenamiento autógeno de Schultz y Mindfulness.
Se ha demostrado científicamente que la práctica integrada de dichas técnicas favorecen las salud psicofísica y la plena forma energética para lograr altos desempeños con rendimientos óptimos, lo que se traduce en productividad y logro de metas.
Recientes Investigaciones neurocientíficas coinciden en que, el entrenamiento regular y persistente en tales prácticas, favorece la potenciación de variables cognitivo-afectivas como las de la atención y concentración; codificación, almacenamiento y recuperación con recuerdo de la memoria, pensamiento crítico e imaginación creativa e innovadora. Además, hay que resaltar, que benefician las relaciones de integración, cohesión, apoyo y cooperación en el trabajo en equipo, lo que resulta clave para la agilidad en la toma de decisiones en entornos VUCA+BANI, ya que son extremadamente cambiantes.
Desde 2007, el profesor Miguel Ángel Gago, viene formando en estas prácticas dirigidas al alto desempeño empresarial y del liderazgo.